Según el modelo de la Teoría de las Estructuras y la filosofía fundamental de las Flores de Bach.
PRESENTACIÓN.
Desde antes del nacimiento las niñas y niños están dotados de un abanico de emociones amplio y complejo que les acompaña cada segundo de su existencia, esta una cualidad inherente al ser humano.
La vida de cada niño/a y su relación con las emociones está mediatizada por el mundo exterior y por el mundo interior. Cada uno, en su yo íntimo, vive las emociones de una manera privada y la conciencia de lo que se vive es intransferible en sí misma. Aunque a través de la palabra o el gesto podamos hacérsela llegar a los demás, ésto sólo es la conceptualización de la emoción y no la emoción en sí. Sin embargo, la forma en que se gestiona el mundo emocional de cada uno sí está condicionada por el exterior, por la familia, los amigos, el barrio, las condiciones sociales, económicas, etc.
¿En qué consiste la educación emocional? En respuesta a este planteamiento se puede hacer un abordaje interesante, creativo y práctico desde la Teoría de las Estructuras y la filosofía fundamental de la Terapia Natural de Flores de Bach.
La educación emocional es educar en el conocimiento del propio mundo emocional para así alcanzar un grado más amplio de conciencia, responsabilidad y libertad. En esencia todas las personas somos libres desde que nacemos hasta que morimos. Somos libres de elegir en cada momento aquello que deseamos hacer, decir o pensar, pero nos hemos olvidado de ello. Hemos cambiado nuestra libertad por una serie de patrones, unos conscientes y otros inconscientes, que hacen de nuestras vidas una respuesta constante a lo que nos rodea, cuando deberíamos ser una pregunta permanente, una curiosidad, una pasión por explorar, por vivir, por descubrir. A pesar de la libertad inherente a nuestra naturaleza muchas personas se convierten en autómatas regidos por programas que la dinámica social ha instaurado como los modelos desde los que vivir. Hemos perdido el espíritu explorador con el que nacimos y con el que vivimos en los primeros años de nuestras vidas.
La educación emocional sería el espacio y el tiempo en el que el niño/a pudiese explorar todo su programa emocional (aunque realmente este proceso de exploración ha de realizarse a lo largo de toda la vida), donde se fomente la atención a la emoción y no la represión de la misma.
Para poder iniciar a las niñas y niños en este proceso de autoconocimiento es fundamental el apoyo y ejemplo de madres, padres, maestras/os, psicólogas/os y otros profesionales relacionados con la infancia. A ellos va dirigido este curso que propone la atención al mundo emocional como medio para un desarrollo integral del niño.
OBJETIVOS.
- Dar a conocer
- Acercar los fundamentos de la filosofía de
- Alentar la corriente educativa y de pensamiento que considera el desarrollo emocional de los niños y niñas fundamental para su adecuada evolución personal y en igualdad.
- Dotar a las madres, padres y profesionales del mundo de la infancia de una herramienta ágil y sencilla a la hora de entrar en contacto con el mundo emocional del niño/a, especialmente cuando presenta algún tipo de conflicto.
- Poner de manifiesto la necesidad de atender al aspecto emocional de los niños y niñas en cualquier ámbito en el que se propicie su desarrollo: familia, escuela y sociedad.
CONTENIDOS.
- Breve acercamiento a la figura de Edward Bach.
- Fundamentos de la filosofía de las Flores de Bach.
- Fundamentos de
- Las 38 estructuras.
- Estudio de los conceptos: limitaciones y desequilibrios que la estructura expresa a través de la conducta y la personalidad, intención positiva de las limitaciones y desequilibrios, enseñanza potenciadora a interiorizar.
- Las fichas florales. Uso práctico.
